¿Por qué engordan los perros cuando los castran?

La castración es un procedimiento común en perros para controlar la reproducción y prevenir enfermedades. Sin embargo, muchos propietarios notan que después de la castración, sus perros tienden a ganar peso. ¿Por qué sucede esto? En este artículo, exploraremos las razones detrás del aumento de peso en perros castrados y cómo manejar esta situación.

Cambios hormonales

La castración implica la remoción quirúrgica de los órganos reproductivos masculinos o femeninos de un perro. En el caso de los perros machos, se extirpan los testículos, mientras que en las hembras se extirpan los ovarios y el útero. Estos órganos son responsables de la producción de hormonas sexuales, como la testosterona y el estrógeno.

Después de la castración, los niveles hormonales de un perro se ven afectados. En los machos, la testosterona disminuye significativamente, lo que puede tener un impacto en el metabolismo y la capacidad de quemar calorías. En las hembras, la falta de estrógeno también puede afectar el metabolismo y provocar un aumento de peso.

Cambio en el apetito

Además de los cambios hormonales, la castración también puede afectar el apetito de un perro. Algunos perros experimentan un aumento en el apetito después de la cirugía, lo que puede llevar a un consumo excesivo de alimentos. El aumento del apetito combinado con un metabolismo más lento puede resultar en un aumento de peso significativo.

Sedentarismo

Después de la castración, algunos perros tienden a volverse menos activos. Esto podría ser el resultado de cambios hormonales o simplemente una respuesta al dolor o incomodidad después de la cirugía. El sedentarismo puede contribuir al aumento de peso, ya que el perro quema menos calorías de las que consume.

Consejos para manejar el aumento de peso

Si notas que tu perro ha ganado peso después de la castración, es importante tomar medidas para manejar la situación. Aquí hay algunos consejos útiles:

• Controla la alimentación: Asegúrate de no sobrealimentar a tu perro y sigue las recomendaciones de alimentación de tu veterinario. Considera cambiar a una dieta específica para perros castrados, que puede tener un contenido calórico y nutricional adecuado.
• Ejercicio regular: Fomenta el ejercicio regular para ayudar a tu perro a mantener un peso saludable. Paseos diarios, juegos con juguetes interactivos y actividades al aire libre son excelentes formas de mantener a tu perro activo.
• Controla las golosinas: Limita la cantidad de golosinas o premios que le das a tu perro. Muchas golosinas comerciales son altas en calorías y pueden contribuir al aumento de peso.

Busca ayuda profesional

Si a pesar de tus esfuerzos, tu perro sigue ganando peso o tienes dificultades para controlar su peso, es importante buscar ayuda profesional. Un veterinario o un nutricionista canino pueden evaluar la situación de manera más exhaustiva y ayudarte a desarrollar un plan de alimentación y ejercicio adecuado para tu perro.

Recuerda, cada perro es único y puede tener diferentes necesidades después de la castración. Al estar atento a los cambios en el peso y tomar medidas tempranas, puedes ayudar a mantener a tu perro en un estado de salud óptimo.

No dudes en contactar a un profesional para obtener más consejos y asesoramiento personalizado. Tu perro confía en ti para cuidar de su bienestar, ¡así que toma medidas hoy mismo para mejorar sus hábitos y mantenerlo saludable y feliz!